Crujeiras ha llegado al club gallego para ocupar el cargo, nada más y nada menos, que de director general, y nada más comenzar su trabajo ha impuesto un Código Ético, un documento que tendrán que firmar todos los miembros del club granate, ya que según comento en su comparecencia ante los medios informativos de la capital gallega "el Pontevedra tiene entre sus principales objetivos realizar una labor social para inculcar a los ciudadanos una serie de valores, y este documento es el primer paso para conseguirlo".

El director general del Pontevedra aseguró que "este código ético es fundamental para el club" y por ello “todos los jugadores que vengan al Pontevedra tienen que firmarlo. Si no lo hacen, aunque deportivamente sean jugadores interesantes, no podrán estar en nuestra entidad".

Con este Código se pretende, además, crear escuela ya que según Crujeiras, "vamos a lograr que dentro de tres años tengamos personas que sean capaces de cumplir este código ético y que transmitan unos valores a los niños que dentro de diez años no van a hacer ese tipo de declaraciones. Estamos sembrando para el futuro, esto no es para la semana que viene. Estamos hablando del primer ladrillo del Pontevedra de dentro de diez años y para nosotros es importantísimo”,

La noticia la publica el Diario de Pontevedra, y en la misma se puede leer que 'El código ético del Pontevedra CF recoge una serie de sanciones económicas para aquellos trabajadores del club que no cumplan los principios del régimen interno del mismo. La multa de mayor cuantía, 10.000 euros, se aplicará a todos aquellos que hagan apología de la violencia en la prensa y a los que discriminen o agredan física o verbalmente al adversario por motivos étnicos, culturales, políticos, religiosos, de lengua, de género o de orientación sexual'.

El documento recoge que “se establecerá una sanción de 300 euros a aquellos deportistas que fuesen sancionados por agresión a un rival fuera del normal desarrollo del juego. Asimismo, se sancionará con 10.000 euros a aquellos deportistas o dirigentes que hagan apología de la violencia en cualquier medio de difusión”.

Crujeiras, señaló en el acto de presentación que "las sanciones económicas son necesarias para alcanzar los objetivos acelerando esa labor social que queremos inducir”. El dirigente granate explicó que las multas son una parte importante del documento y relató su experiencia personal al respecto: “yo recuerdo, -dijo- que siendo jugador hubo años que no había normas de régimen interno. Yo solía llegar el primero o el segundo a trabajar, pero hubo jugadores que nunca llegaron puntuales. Sin embargo, se daba la casualidad de que cuando venía un nuevo técnico y ponía una sanción económica, de repente todos era puntuales”.

El resto de normas que recoge el documento están orientadas al comportamiento en público de los trabajadores del club, especialmente los futbolistas, y se refieren a la promoción del deporte, el compromiso social y cívico, la atención a los medios, la confidencialidad, la indumentaria en actos públicos y los sobornos y comisiones.

Hemos querido recoger esta noticia, primero porque se trata de un directivo que lo fue del Real Jaén, y en segundo lugar por lo curioso del asunto, no porque se disponga de un régimen interno o ético que todos los clubes deben de tener, sino por airearlo de esta forma tan contundente.